Translate

viernes, 22 de marzo de 2013

Verdades mañaneras

Si, esta entrada trata un tema que nos concierne a todos. Una recopilación de anécdotas sobre el peor momento del día. Una entrada sobre todos aquellos hechos que nos fastidian y amargan sólo por haber empezado mal.

Despertarse es como jugar a "la vida" en modo imposible. Todo cuesta más y es mucho más difícil. Las sábanas por ejemplo. Algo que parece pesar unos pocos gramos se vuelve de una tonelada, haciéndonos imposible salir de la cama. Y no es que nos cueste, (que también) es que la diferencia entre levantarnos a las 7:00 y a las 7:05 es mayor que la de ir al estadio en un clásico o un Getafe-Celta. Estos cinco minutos de diferencia son la gloria, y en ellos se ve claramente que te podrías dormir en tres segundos cuando por la noche estás una hora para dormirte.Sin embargo se acaban, y te dejan en la dura realidad de que pierdes el bus.

Una de las peores cosas que te pueden ocurrir es tener algún plan interesante a la mañana siguiente. Te pasarás la noche en vela emocionado por lo que harás en cuanto te despiertes, y echarás ese plan a perder por el sueño que tendrás.

Después están los fines de semana. Algunos pensaréis que haréis algo productivo, levantándoos a las nueve, pero ya os digo yo que no. Os pasaréis la mañana en la cama, leyendo twitter o viendo alguna serie, pero sin hacer nada de importancia.

Y así llevo dieciséis años de mi vida, espero no ser el único.

Carlos M.





lunes, 18 de marzo de 2013

Un mes entretenido.

Un mes. Un mes aproximadamente es lo que nos han dado para escribir en el blog.

Me ha ayudado a pensar, a reflexionar y a divertirme. Ha sido un gran mes. En este tiempo he sido capaz de que unas quinientas personas visiten una página web, algunas de países tan extravagantes como Kazajistán o Indonesia. La verdad, me ha parecido más un hobby que un trabajo. Así qué seguiré escribiendo.

Lo siento pero no me da para escribir más, me quedan treinta segundos antes de las doce. Ha sido divertido teneros.

Carlos M.





Catorce minutos

Catorce minutos, ese es el tiempo del que dispongo para que se me ocurra algo.

Catorce minutos, eso es lo que falta para que sean las doce de la noche.

Catorce minutos, ese es el tiempo durante el que más entradas se van a escribir.

Catorce minutos, es lo que queda para que nuestro cerebro se agote de pensar tanto en tan poco.

Catorce minutos, es la única barrera entre el fracaso y el éxito.

Catorce minutos es lo que queda para que suene el pitido del reloj y me lleve a la triste realidad de no haber escrito suficientes entradas.

Aunque claro, ya sólo son doce.

Alea jacta est.

Carlos M.





Procastination

En inglés, existe una palabra apenas usada en el castellano. Esta palabra es la que más caracteriza a cualquier español (véase que estoy escribiendo esta entrada 30 minutos antes de que se acabe el plazo de escribir) lo niegue o no. Procastinar ( para los que no sepan lo que es, significa "aplazar, dejar para más tarde" según la RAE)  o en inglés "procastination" debería ser una palabra más usada en nuestro idioma.

Se nos puede observar haciendo los deberes de inglés en la clase anterior, bajando la basura después de que nos lo hayan dicho tres veces y te amenacen con castigar, en cualquier trabajo para el que se nos ha dado un mes para hacer (que lo hacemos los dos últimos días) y para cualquier cosa inimaginable. Somos vagos, dejamos todo para más tarde pero ¿Sabéis por qué soy procastinador? Seré mayor, por lo tanto más sabio.

Carlos M.



domingo, 17 de marzo de 2013

Esclavos de nosotros mismos



Esta sociedad, tan llena de prejuicios nos está perjudicando gravemente. Ahora nos importa la opinión de los demás más que la nuestra propia, y vivimos constantemente influenciados por ella. Por ejemplo, hay ropa comodísima pero estéticamente no muy bonita que no triunfa porque a la gente le da miedo que le vean con ella en público, como puede ser la batamanta.

Esta prenda se trata de una especie de manta con mangas para que puedas sacar las manos (comodísimo para el mando de la tele) y bolsillos para guardar cualquier objeto, como el móvil para que no se te esté cayendo cada dos por tres. Además se puede caminar con ella, por lo que para usarla en invierno es increíble. ¿Lo malo? Parece una insulto a la belleza, si no algo peor. Por culpa de esto, una gran idea ha pasado a nada, porque "es fea" y a nadie le gustaría que entrasen en su casa y le viesen con esa aberración puesta.


Esto nos ha cambiado completamente, ya no somos libres, somos esclavos de la sociedad. Puedes escoger, pero entre cosas simples (como que película ver, qué vas a cenar y demás pequeñas cosas cotidianas) que no tienen importancia alguna. En cuanto intentes cambiar, y ser distinto te criticarán. ¿Es esta la sociedad en la que queremos vivir?

Carlos M.






Tiempo perdido

Últimamente se ha puesto de moda una app para smartphone bastante divertida. Esta se llama bike race, y en ella se pueden hacer carreras online con los amigos del Facebook cualidad que le ha hecho ganarse su fama.

En esta aplicación se van adquiriendo nuevas motos según las victorias, así que de la mayoría de personas ha jugado bastante para obtenerlas. Yo por ejemplo tengo 724 victorias, habiendo jugado bastante, pero entre mis amigos suman bastante más. En concreto entre mis 43 amigos jugando hay 37.778 victorias, sólo victorias. Si contásemos de media que cada jugador gana una partida por cada una que pierde hay 75.556 partidas jugadas. De locos.



¿Y cuanto tiempo se ha perdido con esto? Si cada carrera dura de media 15 segundos son 1.133.340. ¡Más de un millón! ¡314 horas¡ ¡Trece días jugando a ese maldito juego! ¡Y sólo jugando! Porque la mayoría de tiempo que perdemos en esta aplicación es esperando a que se cargue. Concretamente según un estudio mío el triple de tiempo, así que ya sabéis, a multiplicar por tres.

Lamentablemente hemos perdido 944 horas y 39 días en un juego que mejor habría sido no conocerlo

Desde luego, quien no aprueba todo es porque no quiere o porque tiene este juego.

Carlos M.












sábado, 16 de marzo de 2013

Optimismo

¿Por qué viviendo en un gran país tenemos que ser tan pesimistas?

Os quejáis de que tenéis que limpiar la casa, por lo tanto ¡Tenéis casa!
Os quejáis de que la gasolina está muy cara ¡Tenéis coche!
Os quejáis de que tenéis que ir al colegio ¡Tendréis un gran futuro con conocimientos!
Os quejáis de que no os dejan salir hasta tarde ¡Os dejan salir!
Os quejáis de que hay mucho ruido ¡Puedes oír!

Es increíble que viviendo en una época y lugar con tantas facilidades nos quejemos tanto ¡Mirad el lado positivo!